paderne
El castillo de Paderne constituye uno de los mejores ejemplares nacionales de construcción de tipo militar. Data del siglo XII (Califato Almohade) y fue uno de los últimos castillos tomados durante la reconquista cristiana. El castillo configura un polígono irregular, teniendo una sola torre, exterior y maciza, la torre albarrana. Destaca el intenso color ocre que contrasta con el verde denso del matorral mediterráneo.
Mantuvo sus funciones militares hasta 1858, época en la que fue abandonado. A pesar de las sucesivas restauraciones, sólo se conservan de su estructura algunos trozos de muralla y el torreón de
entrada. Cruzando las murallas, se encuentran las ruinas de una ermita con vestigios de decoración gótica y manuelina.
El puente del castillo, de construcción romana, tiene un origen medieval y fue construido para dar apoyo al castillo. Mantiene 3 arcos y 2 partes en forma de prisma triangular. Cerca del puente,
se encuentran las ruinas de un molino de agua (Moinho da Alfarrobeira), así como la antigua casa del molinero y el horno.
Se yergue en posición dominante sobre la ribera de Quarteira, cerca de dos kilómetros al sur de la ciudad. Está levantado sobre un promontorio rocoso, rodeado por la Ribeira de Quarteira. Monumento Nacional desde 1971, el Castillo de Paderne tiene la particularidad de haber sido construido en barro en el período Almohade, entre el siglo XII y el siglo XI, durante la última fase de la ocupación musulmana de la Península Ibérica. Fue conquistada a los moros por D.Paio Peres Correia en 1248. Esta fortaleza resultó gravemente dañada por el terremoto de 1755 y, en 1858, fue definitivamente abandonada.
El castillo de Paderne ha sido recientemente restaurado y sirve como objeto de estudio de los pueblos que habitaron esta región.
De la parte superior del castillo también se puede disfrutar de una vista impresionante sobre la Ribeira de Quarteira, el puente y las zonas circundantes. Cuenta con una planta en forma cuadrangular irregular, orgánica, que ocupa una superficie de 1.000 m². Además de las características típicas de la arquitectura militar Almohade, como los muros de tierra apisonada, la torre albarrana de planta cuadrada, que asciende unos diez metros de altura, y la puerta en el ángulo del codo opuesto a la torre, se evidencia influencias de estilo gótico y manuelino, como la barbacana que defendía esa puerta.
El Castillo de Paderne es uno de los siete castillos que aparecen simbolizados en la franja carmesí que rodea el escudo blanco de la bandera nacional. Los cinco escudos azules (escudetes o quinas) simbolizan a los cinco reyes musulmanes que el rey Alfonso Enríquez derrotó en la batalla de Ourique. Los puntos dentro de los escudos (bezantes) representan las cinco llagas de Cristo.
