ruinas Loarre Manzanares Segovia Coca Ampudia Ponferrada Butrón Bellver Peñafiel Olite Almodóvar Alarcón Almansa Belmonte Turégano Mombeltrán Jadraque Alhambra La Mota Monterrei San Javier Aljafería La Atalaya Alburquerque Calatrava La Nueva Cuellar Sigüenza Fuensaldaña Seseña Simancas Oropesa Peñiscola Vélez Blanco Valencia de don Juan Torija Cardona Alcázar de Sevilla Alcañiz Sotomayor Consuegra

castillos peninsulares

tebra

tebra_tomiño-escudo

El castillo de Tebra se encuentra en la localidad de Santa María de Tebra, en uno de los valles del municipio de Tomiño, en la comarca de Tebra, lugar por donde discurre el río con el mismo nombre y que desemboca en el río gallego más importante, el Miño. Es una zona que se caracteriza por su cercanía con la vecina Portugal y con la región de Tuy, situada al suroeste de la provincia de Pontevedra.


El edificio primigenio fue construido en 1478 por Pedro Madruga. Posteriormente fue destruido por orden de los Reyes Católicos, para levantar, en los años siguiente y por orden de Juana la Loca, una torre que sustituyera al entramado defensivo, así como el resto de las dependencias. Todo lo restante es de época renacentista. El cambio de gustos que se había producido en esta etapa histórica se manifestará de forma destacada en esta edificación. En el año 1533 pasó a manos del conde de Camiña.


El material utilizado es la piedra, que está perfectamente labrada y colocada en sillares alineados los unos en correspondencia con los otros hasta dar como resultado una contundencia en sus muros y en cada una de sus estructuras. La piedra es una materia prima dura y resistente muy apropiada para estas edificaciones que debían resistir las embestidas históricas.


En la actualidad el castillo se encuentra en buenas condiciones. Es una espléndida obra de arte que emerge en el verde paisaje gallego. Aparecen algunos elementos de época medieval, pero lo más destacado es la torre y el resto de dependencias del siglo XVI, que son lo que mejor se conserva.

tebra

El elemento defensivo más destacado de todo el complejo arquitectónico es, sin duda alguna, la torre del homenaje, que destaca visiblemente del conjunto. Las almenas, los garitones y la cornisa completan el cuadro defensivo además de servir de decoración al edificio y romper su continuidad artística. Todo ello, junto a su estructura, le da un aspecto de robustez y dureza.


La torre del homenaje es de estilo renacentista, tiene forma cuadrada y se caracteriza por la anchura de sus lados, que miden unos 8 metros, y por el grosor, que es de 1,5 metros aproximadamente. En su totalidad tiene cuatro pisos, la planta baja y tres alturas más unidas a una terraza rodeada de una cornisa. En lo alto de la torre, y claramente visible por todos aquellos que se acercaran al castillo, aparecen una inscripción hecha en latín y un escudo, de claro estilo renacentista y en coordinación con la costumbre de la época.


Además de la torre del homeneje detacan el resto de las dependencias que se encuentran a su alrededor. Entre ellas podemos señalar un amplio mirador, una galería con arcos semicirculares, un torreón alto y estrecho y una capilla con autonomía propia. De importancia es la alternancia de saeteras con vanos rematados en cruz, lo que nos indica que estamos ante un edificio con connotaciones defensivas.

tebra
Template by Clairvo Yance
Mariano García marianogarcia.besaba.com and Mariano García.