alcázar de córdoba
Al sur del Campo Santo de los Mártires, flanqueada por sus torres del Homenaje y de los Leones, se extiende la almenada muralla del Alcázar de los Reyes Cristianos, “el monumento más sobresaliente de la arquitectura militar” que conserva Córdoba.
Antiguo palacio real y posterior cárcel, construido en el siglo XIV sobre el alcázar andalusí. Está situado Campo de los Santos Mártires de Córdoba, a orillas del río Guadalquivir y en el entorno de la Mezquita Catedral. Entre sus residentes más destacados, estuvieron los Reyes Católicos, cuya hija, la infanta doña María nació aquí.
Tras la conquista castellana de la ciudad el solar ocupado por el antiguo Alcázar andalusí fue repartido entre el rey Fernando III, el obispo, algunos nobles y la Orden de Calatrava. Fue decidida su fortificación entre el año 1328 y 1329, por el rey castellano, Alfonso XI, sobre construcciones anteriores.
Alojamiento de reyes durante sus estancias en Córdoba, los Reyes Católicos pasaron más de ocho años en la fortaleza dirigiendo desde la misma la campaña contra el Reino de Granada. Durante esos años la reina Isabel tuvo a uno de sus hijos: la infanta Doña María, futura reina de Portugal. En estas mismas dependencias Cristóbal Colón solicitó fondos para su aventura marítima en el año 1486. Tras la campaña de Granada y la finalización de las campañas contra los musulmanes en España, los Reyes Católicos cedieron el inmueble a las autoridades eclesiásticas, las cuales lo convirtieron en Tribunal del Santo Oficio, perdiendo entonces su carácter palaciego.
En 1812, y tras la abolición por parte de las Cortes Constituyentes de Cádiz del Tribunal de la Inquisición, se convirtió en cárcel civil hasta que en el año 1931, se destinó a instalaciones militares, los cuales lo cedieron en el año 1955 al Ayuntamiento de Córdoba.
Actualmente el Alcázar es sede de diferentes eventos municipales, como la celebración de bodas civiles impartidas por diferentes ediles cordobeses, o exposiciones y presentaciones varias.
El conjunto arquitectónico tiene un carácter sobrio en su exterior y espléndido en su interior, con los magníficos jardines y patios que mantienen una inspiración mudéjar. Se encuentra rematado por cuatro torres (Paloma, Leones, Homenaje e Inquisición), dando al edificio una forma casi cuadrada. La sala principal del edificio se denomina sala de los Mosaicos, ya que en ella se pueden admirar los impresionantes mosaicos encontrados a finales de los años 50 en la Plaza de la Corredera, así como un sarcófago del siglo III.
En el subsuelo de la actual planta es posible encontrar aún restos de los que se cree que eran baños reales utilizados por altos dignatarios de la época musulmana. La antigua Huerta del Alcázar se ha transformado en una impresionante superficie de aproximadamente 55.000m² de magníficos jardines con especies como palmeras, cipreses, naranjos y limoneros, que rodean a unos elegantes fuentes y estanques.