constantina
El asentamiento de época céltica fue llamado Laconimurgi por Plineo, topónimo que es renovado durante los años de la colonización romana por el de Constancia Iulia, cuyos restos arqueológicos se encuentran en el llamado Cerro del Almendro, resultando pues, un enclave cuya importancia radicaba básicamente en su situación estratégica tanto en relación con el trazado de las vías que comunicaban el Valle del Guadalquivir y Lusitania como para el aprovechamiento de los recursos naturales relacionados con la minería del cobre y la plata.
En época islámica la ciudad comienza a configurar su fisonomía como núcleo de población compacto. El primer desarrollo urbano se crea en el aún existente Barrio de la Morería, ubicado como arrabal en la ladera meridional del cerro del castillo. Este recinto principal contó en sus proximidades con otros enclaves fortificados como el existente en el llamado Cerro del Almendro, el baluarte de la Ermita de Yedra, el castillo de la Armada y algunas torres almenaras creadas para reforzar el control territorial de este paso natural de comunicación.
La Constantina musulmana fue entregada en 1247 al rey Fernando III de Castilla, quien la agrega al término de Córdoba. En 1258 se anexiona al reino de Sevilla por privilegio de Alfonso X, haciendo donación de la villa y el castillo al prelado hispalense.
El castillo de Constantina, también conocido como castillo del Cerro del Castillo se encuentra situado en la parte alta de la localidad, al oeste de su casco urbano tradicional.
Se trata de un amplio recinto de planta poligonal que tiene su principal elemento en su Torre del Homenaje.
Esta fortaleza probablemente sea de época almohade, del siglo XIII, reconstruida posteriormente en época cristiana, aunque parece probado que se emplaza sobre los restos de un castrum romano anterior y quizás sobre otras estructuras militares construidas aprovechando el dominio que el cerro en el que se levanta tiene sobre el Valle de la Osa.
Está constituida por un total de diez tramos de muralla, de dos metros de espesor, que se muestran flanqueado por siete torres, de las que aún se conservan dos completas, más una barbacana que la circundaba por el exterior. El castillo se organiza alrededor de un gran patio de armas y un aljibe semienterrado, de grandes dimensiones, que garantizaba el almacenamiento de agua a la guarnición militar, y que se conserva en buen estado.
Este castillo, por su acceso acodado y su planta poligonal, solución insólita en la provincia de Sevilla, se convierte en un caso paralelo a otros recintos africanos almorávides.
La Torre del Homenaje del Castillo de Constantina, popularmente conocida como La Almena, se eleva 12 metros sobre el monte que domina la población. Es la principal de las tres torres que se conservan de siete que tuvo la fortaleza medieval. La madrugada del 10 de marzo de 2010 sus numerosas deficiencias arquitectónicas se manifestaron bajo un fuerte temporal que desencadenó su derrumbe. Desde ese mismo día y a solicitud del arquitecto conservador Fernando Vilaplana Villajos, los técnicos de Dédalo Bienes Culturales colaboraron con la dirección de los trabajos, tanto para las tareas de acopio y clasificación de materiales como para establecer las preceptivas cautelas arqueológicas y patrimoniales, así como en la documentación del proyecto.
Gracias a la gestión de las auoridades locales y a la disposición de la Diputación de Sevilla, en junio de 2010 comenzaban las obras de consolidación de los antemuros y lienzos de muralla de la fortaleza con cargo al Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), adjudicadas a la empresa Sardalla Española SA. que contó con Dédalo Bienes Culturales para la actividad arqueológica preventiva de apoyo a la restauración. Al mismo tiempo se encargaba al arquitecto Fernando Vilaplana el proyecto para su reconstrucción, proponiéndose la anastilosis de las partes preservadas y el empleo de los materiales originales. La reconstrucción, rigurasamente documentada, empezó en febrero de 2013 con cargo a los fondos del 1% Cultural del Ministerio de Fomento (75%), y aportaciones de la Dirección General de Bienes Culturales de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Constantina. Las obras fueron adjudicadas a la empresa Hermanos Campano SL. que contó en todo momento con la cooperación de nuestros técnico. La Almena fue de nuevo abierta al público el 25 de junio de 2013.