castilnovo
El castillo de Galofre se encuentra a las afueras de Villafranca en el término municipal de Condado de Castilnovo, a unos 8 kilómetros al sur de Sepúlveda.
Fue Abderraman I quien probablemente fundara este castillo morisco en el siglo XII, aunque el castillo actual data de entre los siglos XIV y XVI, y las ultimas reformas se remontan a los siglos XIX y XX. Se encuentra en buen estado de conservación, gracias a las reformas de los dos últimos siglos.
Aunque Abderraman I fuera probablemente el que fundara este castillo morisco en el siglo XII, el castillo actual data de entre los siglos XIV y XVI, y las ultimas reformas se remontan a los siglos XIX y XX.
Perteneció, entre otros, a don Álvaro de Luna, a la familia Stúñiga, y a los duques de Frías. Alojó a los futuros reyes de Aragón, Fernando y Leonor, a Enrique
IV, los Reyes Católicos y, en el siglo XVI, a los hijos del rey de Francia, Francisco I, como rehenes, tras la batalla de Pavía.
En 1859 el príncipe alemán de Hohenzollern, su propietario, se lo vendió a José Galofre, secretario y pintor de Cámara de la reina Isabel II.
Después el castillo ha pertenecido a los marqueses de Quintanar quienes lo vendieron a una asociación hispano-mejicana, llamada Castilnovo S.A., convirtiendo éste en una gran mansión.
Su planta es cuadrada, y su construcción mudéjar. Sus muros están coronados por almenas, flanqueadas por seis torres. La influencia morisca se deja notar, y la edificación en su conjunto muestra un aspecto mudéjar. Se encuentra en buen estado de conservación, debido a las numerosas reformas realizadas a lo largo de los siglos XIX y XX.
Es de propiedad particular, pertenece a la Asociación Cultural Hispano Mexicana, y las actividades que se realizan en él son de carácter cultural, recepciones, exposiciones, museo, etc.. Existe la posibilidad de alquilarlo para bodas, reuniones de empresa y otros eventos.